Esta es una ceremonia originaria de los pueblos de America, se practica en la actualidad desde Guatemala hasta el extremo norte de Canada. Hay tambien vestigios de ella en la Siberia, por lo que se cree que en algun momento haya sido universal. A traves de ella se logra una limpieza o purificacion no solo fisica, sino emocional y espiritual y es la oportunidad de sanar resentimientos y actitudes negativas con nuestras relaciones. Es la oportunidad de sanar los traumas que nos vienen aun desde el vientre de nuestra madre biologica.
Esta ceremonia tiene miles de años, fue una de las primeras entregadas por El Creador al hombre, y está basada en la bendición y en la purificación del ser humano a través del liquido sagrado del agua y a través del calor de la vida. En el Temazcal recordamos que venimos del vientre sagrado que es el vientre de la Madre Tierra, el lugar donde fuimos concebidos, alimentados como semilla para llegar a tener la unidad de todos los poderes del Universo. Nuestro origen es el vientre de la Madre Tierra y por esta razon nosotros tomamos forma, tomamos fuerza en la ceremonia de Temazcal.
Usamos piedras que alguna vez tuvieron el calor que viene
de las entrañas mismas de la
Madre Tierra, que salieron a la superficie y que guardan los
registros de la Tierra
desde tiempos inmemoriales. Encendemos
un fuego, ponemos un rezo, un buen pensamiento y calentamos las Abuelitas
Piedras que, una vez calientes, llevamos a una pequeña cabaña circular y oscura
que simboliza el vientre de la
Madre Tierra y donde esta reunida la gente.
Depositamos agua sobre las
piedras para recibir la bendicion del agua y en ese vapor las Abuelas liberan
lecciones ancestrales que nos ayudan a despertar la memoria y nos damos cuenta
de cómo se mueve el Poder. A esto le
llamamos la Memoria
del Primer Aliento y todos juntos compartimos un misterio, una oscuridad, un
momento de profundidad en el Universo en el cual se recrea el milagro de la
vida, la union de lo masculino y lo femenino, el perfecto equilibrio de los
cuatro elementos. En esta oscuridad nos
encontramos con lo mejor y lo peor de nosotros mismos y tenemos la oportunidad
de sanar y purificar para renacer.
Cuando termina la ceremonia vivimos otro momento muy especial al salir
de la cabaña, ver la luz y respirar el
aire fresco, asi como cuando uno sale del vientre de la madre y respira por
primera vez.
Hemos cumplido entonces nuestro
proposito de purificar el cuerpo, la mente y el espiritu, despertar la memoria
ancestral y ayudar al restablecimiento de Todas Nuestras Relaciones.
Cuando entramos al Temazcal
estamos volviendo al origen, de alguna manera nos retiramos a lo mas profundo
de nuestro ser para desde allí tener la oportunidad de observar nuestra vida
con una perspectiva desde la cual vemos la dimensión real de todo lo que nos
rodea. Dentro de esta oscuridad tenemos la oportunidad de encontrar la
claridad, de vernos a nosotros mismos de la manera como realmente somos, y
reconocer esos aspectos con los cuales ya no queremos caminar para así poder trabajar
en nuestra transformación.
En esta ceremonia nos encontramos
recreando y celebrando la vida misma, por eso esta es una ceremonia de puro
amor, de pura unidad, de pura vibración, porque ahí es donde volvemos a sentir
el latido de nuestro corazón, ahí también es donde sentimos el funcionamiento
de nuestra capacidad, al respirar, al alimentarnos del conocimiento guardado y
perpetuado en esas piedras que vienen de las entrañas mismas de la Madre
Tierra.
Nos trae tranquilidad, paz, nos
ayuda a ver que todo esta bien, y de esta manera nos trae sanación. A veces
sucede que llega alguien que no esta bien porque no sabe por que esta viviendo
alguna situación difícil, alguien que esta enfermo, alguien que esta sufriendo,
y ahí mismo prestando atención, entregándose, se da cuenta que en esa oscuridad
es posible tener la claridad para comprender, para encontrar las respuestas,
para resolver, para sanar, para perdonar, y así volver a estar bien.
Todo esto sucede dentro del
Temazcal en una forma directa, con una vibración donde el ser sabe que está en
paz, en armonía , en su estado de éxtasis total con todo, escuchando el sonido
del tambor, del corazón, que le permite comprender que no hay diferencia con
nada de lo que esta a su alrededor, y que también puede comprender que tampoco
hay diferencia con nada de lo que está en su interior, para así poder volver a
la totalidad de ser, a la recuperación total del estar. En esto están los
elementos necesarios para encontrar todas las medicinas que existen, para encontrar
como estar bien en esta vida, como no sufrir ninguna enfermedad, como estar en
paz, en armonía.
Que llevar:
*Toalla
*frutas y otros alimentos para
compartir después de la ceremonia.
*hombres, pantaloneta.
*Mujeres: blusa y/o un pareo o
falda larga.
* Ofrenda de Tabaco
Las mujeres en su sagrado tiempo
de la luna (menstruación) se abstienen de entrar al Temazcal, hay un espacio por fuera dedicado para ellas.
El texto escrito por una abuela del Camino Rojo
El texto escrito por una abuela del Camino Rojo
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